El Tribunal de las Aguas ha sido declarado en septiembre 2009 Patrimonio Inmaterial de la Humanidad
El Tribunal de Aguas de Valencia "es el único testimonio de una tradición cultural viva: la de la justicia y el gobierno democrático y autogestionario de las aguas por parte de los campesinos andalusíes en las huertas".
Esta institución es el órgano jurídico más antiguo de Europa que permanece vigente. Además es socialmente reconocida y, por ello, ha ido transmitiendo su valor de generación en generación, garantizando así su continuidad.
Sus primeras actuaciones se remontan a mitad del siglo X cuando, bajo el reinado de Abderramán III, se estableció como mecanismo para controlar el reparto del agua del río Turia. Entonces, la escasez de agua, sobre todo durante el verano, ya hacía necesaria una regulación de su uso.
Esta institución es el órgano jurídico más antiguo de Europa que permanece vigente. Además es socialmente reconocida y, por ello, ha ido transmitiendo su valor de generación en generación, garantizando así su continuidad.
Sus primeras actuaciones se remontan a mitad del siglo X cuando, bajo el reinado de Abderramán III, se estableció como mecanismo para controlar el reparto del agua del río Turia. Entonces, la escasez de agua, sobre todo durante el verano, ya hacía necesaria una regulación de su uso.
No fue hasta el 29 de diciembre de 1239, cuando la institución se conformó oficialmente
A las doce en punto del mediodía, en la puerta de los Apóstoles de la Catedral de Valencia y cada jueves del año desde hace más de un milenio, el Tribunal de las Aguas, un jurado formado por regantes de ocho acequias de Valencia, sigue cumpliendo su función: resolver en plena calle, los conflictos que por el agua de riego puedan surgir entre los agricultores.
El alguacil llama a los denunciados de cada una de las acequias, con la tradicional frase: “denunciats de la sèquia de...! ”.
El juicio se desarrolla de forma rápida, oral e íntegramente en valenciano.
El denunciante, que suele ser el guarda de la acequia a la que pertenece el infractor, expone el caso ante el Tribunal, y después el denunciado se defiende a sí mismo y responde a las preguntas del síndico de la acequia a la que pertenece. A continuación el Tribunal decide la culpabilidad o no del denunciado.
Todavía hoy en día la pena se impone en “sueldos”, tal y como se hacía en época medieval, entendiéndose actualmente por “1 sueldo”, el sueldo diario del guarda de la acequia.
(fuente: www.lasprovincias.es y Wikipedia)
El juicio se desarrolla de forma rápida, oral e íntegramente en valenciano.
El denunciante, que suele ser el guarda de la acequia a la que pertenece el infractor, expone el caso ante el Tribunal, y después el denunciado se defiende a sí mismo y responde a las preguntas del síndico de la acequia a la que pertenece. A continuación el Tribunal decide la culpabilidad o no del denunciado.
Todavía hoy en día la pena se impone en “sueldos”, tal y como se hacía en época medieval, entendiéndose actualmente por “1 sueldo”, el sueldo diario del guarda de la acequia.
(fuente: www.lasprovincias.es y Wikipedia)
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